Los empleos verdes no son cosa del futuro, actualmente hay más de 1,200 millones de personas (40% del empleo formal total en el mundo) que trabajan directamente en actividades que dependen de los servicios ecosistémicos y del medio ambiente, como es la agricultura, la pesca, la silvicultura o el turismo.
En América Latina, los países que emplean a más personas en actividades verdes relacionadas a sectores de energía solar y transporte eléctrico son: México con 56 mil personas, Ecuador con 44 mil, Argentina con 15 y Brasil con 1 millón.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) define los empleos verdes como empleos decentes que contribuyen a preservar y restaurar el medio ambiente ya sea en los sectores tradicionales como la manufactura o la construcción o en nuevos sectores emergentes como las energías renovables y la eficiencia energética.
Mientras que el Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas (PNUMA), señala que los empleos verdes reducen el consumo de energía y materias primas, limitan las emisiones de gases de efecto invernadero, minimizan el desperdicio y la contaminación, protegen y restauran los ecosistemas y desarrollan empresas para que las comunidades pueden adaptarse al cambio climático. Estos empleos se pueden encontrar en cualquier sector económico y cualquier empresa y se distinguen además por ser trabajos decentes.